” La silla en la que me siento esta llena de colores, priman los morados, rosas y fucsias, algunos azules y amarillos se asoman tímidamente. Me siento en la mañana, en la tarde y en la noche; cuando no estoy allí,en la silla, me siento en la cama, me muevo en la terraza o doy pequeños saltos sin zapatos en la cocina. Me siento de nuevo, en frente tengo un rectángulo ocupado por hojas, lápices, a veces una lámpara o a veces un computador. Sentada miro por la ventana con ojos cansados, miro el techo y pienso mucho, siempre los mismos pensamientos, a veces se presentan algunos nuevos y escasos como los amarillos y azules de la silla que por fortuna tengo.”