La Vida es un suspiro

La vida comienza con un “respiro” – el primer “llanto” – y la actividad rítmica del pulmón lo sostiene y lo acompaña silenciosamente durante toda su duración hasta el final, al final de los días, exhalando el último “respiro”.

A lo largo de la historia de la espiritualidad humana, con su diversidad de mitos, prácticas y creencias, la respiración siempre ha sido fuente de meditación y reflexión. Esto no es de extrañar. La respiración está conectada con la vida. Respirar es vivir. Cuando nacen los seres humanos, junto con los mamíferos, las aves y los reptiles, toman su primer aliento, y con su último aliento, la vida se retira del cuerpo.

Y es así como estos últimos meses me han acompañado sucesos que han marcado mi vida, las despedidas de esos seres queridos, mis abuelos quienes en el mes de enero del presente año han fallecido, a causa de diferentes circunstancias una de ellas el Covid-19 una  enfermedad que es silenciosa te arrebata la vida sin dar la oportunidad de una despedida, solo un último suspiro, este bordado lo realice en tributo a la memoria de mis abuelos y a el duelo que vive una hija de perder a sus papas.